Un vino, que he salido a tirar la basura

¿Alguna vez os habéis preguntado cómo vais a ser de mayores?

Cuando eres chaval, te imaginas en tu vida adulto constantemente, aunque luego la realidad no tenga nada que ver con lo que uno soñaba.

En cambio, pocas veces te paras a pensar cómo será tu vida cuando seas anciano.

O, por lo menos, pocas veces he tenido este tema de conversación con alguien.

Pasamos tantos años de nuestra vida dedicándonos a las obligaciones que se hace bastante raro llegar al punto de la jubilación donde, de repente, no hay “nada que hacer”.

Yo, desde luego, tengo una cosa clara en ese punto de la vida.

Voy a ser el abuelo vacilón.

Seguramente mis chistes ya no sean comprendidos por las generaciones que dominen la ciudad en esa época, pero voy a hacer lo que me dé la gana.

Y a llorar, a la llorería.

Porque hay muchos tipos de jubilados.

El otro día estuve tomando una cerveza en un bar. AL lado mío, en la barra, tenía a un anciano tomándose una copita de vino blanco.

Solo.

Cuando voy a pagar para irme, un camarero le estaba rellenando la copa hasta que el buen señor le dijo:

Vale, vale. Si yo sólo he bajado a tirar la basura”.

Olé sus huevos gordos.

Cuando llegas al punto de gastarte 5 euros bajando la basura, para tomarte dos vinos corriendo en la barra de un bar de mala muerte, algo está pasando.

Bueno, algo ha pasado. Algo te ha llevado por delante.

Y ahí, es complicado pivotar.

Ahora, si no quieres acabar en la barra de otro bar de la misma forma, puedes pasarte por aquí y comprar mi libro.

¿Te va a salvar de las desgracias?

No.

Pero tampoco te viene mal.

El precio de ahora es de preventa. El día 1 de noviembre, sube.

Nos vemos en la próxima reflexión.

O no.

P.D: estoy rematando los trámites del físico. Esto de ser escritor es agotador 😂

P.D.2: ¡Hoy es sábado! Te dejo la recomendación del vino de la semana en la biblioteca.

P.D.3: ¿No estás suscrito? Te mato.