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Lo prometido es deuda
Te prometí un caso real sobre una empresa que facturaba 800.000€ anuales y aquí viene.
Quédate con esta historia, porque es la última que traigo en este canal de este estilo.
Las novedades, al final.
Cuando uno piensa en una empresa que mueve esas cantidades de dinero al año, lo primero que piensa es que será un empresón. Una compañía estructurada, con unos cimientos sólidos y un montón de profesionales competentes en sus respectivas áreas.
Pues bien, déjame decirte que cada empresa es un mundo.
Una empresa no es más que el resultado de una o varias personas que han decidido montar algo para ganar pasta o ayudar a otras personas.
Son como hijos con CIF y beneficios fiscales.
Unos son cuadriculados, operativos, precisos.
Otros, más caóticos y con el pensamiento en las nubes.
Están los que sacan buenas notas y los que no.
Bueno, pues eso. Que cuanto más empresas conoces, más te das cuenta que son tan parecidas entre sí y tan diferentes como lo somos los propios seres humanos.
Esta que te traigo hoy, en particular, lleva más de 15 años, trabajan a nivel internacional. Y, encima, con clientes bastante pepinos.
Pepinos rollo Netflix.
¿Y sabéis por qué?
Porque son j0didamente buenos en lo suyo.
No son unos maestros de empresariales ni de los negocios. Simplemente, crearon escuela en su sector y han ido cogiendo clientes por la alta calidad de sus servicios.
Resultado: dos colegas con una empresa que factura casi un millón y 16 trabajadores.
Problema: están sobrepasados, la empresa depende al 100% de su trabajo y no tienen capacidad para seguir creciendo.
Aquí, después de la asesoría solidaria que contrataron hace un mes mediante nuestras newsletter, aplicamos la técnica que os comenté “ayer” (entre otras cosas):
De todo lo que tengo que hacer, ¿qué es lo que me acerca más a mi objetivo?
¿Cuál de las siguientes cosas hay que, si no hago hoy, me perjudica directamente y me aleja de mi objetivo?
¿Tengo que hacerlo yo, o lo puede hacer otra persona?
El 90% de las tareas que realizaban no aportaban ningún valor diferencial a la empresa y, por el contrario, estaban dejando de hacer cosas o desarrollar áreas que eran fundamentales para los objetivos que estaban haciendo.
Solamente dos semanas después de nuestra charla, ya habían comenzado reestructuraciones en su organización que les permitirá:
Liberarles de tareas inútiles que les tenían quemados y sin tiempo libre.
Establecer las bases para afrontar el próximo crecimiento, teniendo más capacidad de absorber trabajos con el mismo personal.
Abrir dos nuevas líneas de negocio que, hasta el momento, les parecía inviable.
En sólo dos semanas.
¿Apostamos a que sobrepasan el millón este año con creces?
El tiempo es el mismo para todo el mundo y la única diferencia entre la gente es emplearlo en hacer cosas realmente útiles o en quimeras que absorben recursos y energía.
Nos vemos en la próxima reflexión.
O no.
P.D. el motivo del ghosting fue el nacimiento de mi hija :) Espero que me perdonen.
P.D.2: vienen cambios en la newsletter. Vamos a darle un empujón más para que sea todavía más potente. Te lo cuento en detalle el domingo.
P.D.3: si sigues sin pasarle este enlace a tu amigo el que tiene una empresa, le estás haciendo un flaco favor. Reenvíale este mail.